Ayer estuvimos en Berriozar acompañando a la familia y a los Vecinos de Paz, en el séptimo aniversario del asesinato de Francisco Casanova. El programa de actos incluía una “Misa navarra” en el transcurso de la cual el párroco, Jesús Aizpún, puso el dedo en la llaga al hablar de la lacra del terrorismo: “hablamos poco de las causas del terrorismo y estás son importantes para erradicarlo” destacó que este fenómeno, en realidad, es otra religión más que idolatra a señores con minúsculas y exige sacrificios humanos. También denunció el relativismo, destacando que llevamos mucho tiempo despreciando nuestros propios valores que son los valores de occidente.

No hay comentarios:
Publicar un comentario